domingo, octubre 08, 2006

COAYLLO

Este domingo fuimos a Coayllo, lugar desconocido para mí hasta entonces. Coayllo es un pueblito al cual se puede acceder llegando al distrito de Asia. Una trocha abandonada es la única forma de llegar a esta pequeña localidad.

Empezamos el día muy temprano, buscando a mi primo Julio a las 6:00 a.m. con quien fuimos pedaleando hasta Arequipa con Aramburu, en Miraflores, allí nos encontrarnos con la gente de Lima Bike.

Junto con 24 personas aproximadamente, salimos con dirección al centro de Lima con la intención de tomar el bus, que nos llevaría al distrito sureño de Mala. Conseguimos un bus con parrilla, en la cual colocamos todas las bicicletas. El costo del viaje fue de 5 soles por persona. Por cierto, dicho vehículo se demoró bastante, nos paseó, en su afán de conseguir más pasajeros.

Llegamos después de aproximadamente 2 horas a Mala, donde salimos con dirección a Asia, pedaleando. Una vez allí, en el grifo ubicado en plena Panamericana, hicimos una parada, para adquirir bebidas.

Hasta que llegamos al pueblo de Asia. La trocha que conecta Asia con Coayllo es de 17 Km. A la altura del quinto kilómetro del camino termina lo que alguna vez fue el asfalto, iniciándose el sendero mas empedrado.

El camino de ida fue en su mayor parte subida. Ya casi al llegar a nuestro destino, mis piernas no daban mas, sentía que no soportaba un ascenso más. Hasta que divisé el pueblo, dejando atrás los cerros y los sembriós de níspero.

Llegué en segundo lugar. Cosa anecdótica pues cabe destacar que NO fue una carrera. Pero siempre hay algunas personas que tratamos de picar para ser los primeros, o para exigirnos. Después de esperar por un lapso de 30 minutos que llegasen todos los demás ciclistas, fuimos a la plaza de armas, pequeña, pero bastante concurrida, pues, al parecer, se celebraba el día central del pueblo.

Almorzamos en el mejor restaurante, la verdad que muy rica la comida, y lo principal, ligera. Que nos permitió iniciar el retorno después de unos 45 minutos sin tener problemas de digestión.

Antes de partir pudimos apreciar, una danza típica del lugar, acompañada de su grupo sonoro, pequeña pero bastante simbólica, la cual podras apreciar en las fotos publicadas al final de este relato.

El regreso fue en mayor medida bajada. Lo cual fue menos desgastante que la ida.
Regresamos por la misma ruta, donde tomamos nuevamente el bus rumbo a Lima. Bajamos en Javier Prado y cada uno rumbo a casa, llegando aproximadamente a las 7:45 p.m. El próximo fin de semana nos vamos a Chilca, ¡Veremos que sale!

VER SESION DE FOTOS

No hay comentarios.: